martes, 26 de julio de 2011

Rodarán cabezas





Pobrecito. No es que fuera un inepto, ni que los bancos sean unos ladrones: se ve que había pasado mala noche y se le olvidó avisarme de que iba a cobrarme 30 euros por cada transferencia, e hice dos. No es que las cajas nos quiten nuestro dinero, es que se les olvida decirnos que tenemos que dárselo, nada más. Por eso no quemé la sucursal y me limité a decir "cabrones" en bajito, y no grité "hijos de puta".



A los españoles nos tratan como a borregos drogados y luego cambiamos de canal cuando los indignados salen en el telediario. Nos gusta recibir contenidos mucho más importantes por televisión, como Belén Esteban atiborrándose de magdalenas. Y es que pensar cuesta mucho trabajo, es incómodo darte cuenta de que tienes algo en la cabeza que te impide quedarte quieto, volver al banco y exigir que te devuelvan lo que es tuyo.

Que no nos extrañe si alguno corre la misma suerte que Luis XVI: a este paso, rodarán cabezas.

3 comentarios:

Eingel dijo...

La batalla ha comenzado. Luchamos por nuestra dignidad, nuestra vida y nuestro futuro

Y que nos llamen perroflautas, que no me importa como me llamen mientras no duerman tranquilos con mi presencia

Besooos

la GLORI dijo...

¡ Y eso que es diabética !

MUAAAAAAAAAAAAAC

Roto pero contento dijo...

Es una lastima, no lo creemos todo, dudo que nadie pueda cambiar es sistema... hubo un tiempo en que viví esperanzado, después toda ha quedado en humo.