Foto: @martavidanlo
Lo llena todo. Lo llena todo, además, de un sentido nuevo. De un sentido mejor, más bello: lo hace todo más disfrutable, más digno de decir que merece la pena. La música le da sentido, también, a los oídos. Sin ella, la función de nuestras orejas equivaldría a utilizar un Cadillac sólo para ir a comprar el pan. Por eso, por todo eso, la música no es parte de la vida: es otra vida, una más grande.